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45 metáforas y moldes creativos para innovar

MOLDE 36

HAZLO VERDE

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Cada vez hay más conciencia de la necesidad de ser respetuosos y de cuidar el medioambiente. Así los consumidores empiezan a rechazar, aunque todavía tímidamente, aquellos productos o marcas que son contaminantes o que violan principios éticos básicos en su interacción con la naturaleza.

Esta tendencia está despegando con fuerza en Europa y en Estados Unidos, así que se abren oportunidades para apostar por estrategias “verdes” que mejoren notablemente la imagen de empresas y productos, y consigan conquistar cierta diferenciación en el mercado.

Empieza a ser común el impulso de proyectos para “ecologizar” productos o servicios, y que pasan por la revisión del ciclo completo de reciclaje y valorización de los productos, el etiquetado ecológico, la reducción de la cantidad de plástico en los envasados y la utilización de materiales biodegradables.

Ya existen en el mercado cientos de productos ecológicos alternativos con los que podemos sustituir los viejos y obsoletos materiales contaminantes: desagües sin PVC, tableros de aglomerado sin colas tóxicas, aislamientos de fibra vegetal o corcho triturado, etc. Las pinturas, barnices, pegamentos y disolventes que utilizamos habitualmente también son muy contaminantes.

Aunque suponga una inversión que pueda encarecer el producto o servicio, lo cierto es que adoptar políticas verdes en el diseño y comercialización puede dar una ventaja competitiva importante a la empresa que lo haga con la adecuada convicción.

Es una tendencia que funciona siempre que sea genuina, y se base en una estrategia coherente que huya de cualquier tentación de manipular la percepción de los consumidores

Cualquier producto o servicio puede someterse a un proyecto de innovación que lo haga más verde. Las oportunidades de transformación en este ámbito son infinitas porque la mejora medioambiental tiene trayectorias múltiples.

La eco-innovación exige una mezcla ingeniosa de tecnología y sensibilización. Esto sin duda la hace más compleja. Trasmitir al consumidor una sensación de satisfacción y placer por su compromiso medioambiental solo se consigue con credibilidad y aportando información de calidad, que le ayude a comprender cuál es el impacto directo de su acción.

RECOMENDACIONES DE USO

Un problema que tienen los productos-verdes es que habitualmente (aunque no siempre) son más caros que los convencionales. Frente a la ventaja inmediata que supone un producto más barato, los productos ecológicos proporcionan al consumidor beneficios materiales diferidos en el tiempo, puesto que el impacto en la protección medioambiental es percibido a medio y largo plazo. Este hecho ha de ser reconocido con realismo para que las estrategias seguidas por las empresas sean permanentes y sostenibles en el tiempo. Solo así se pueden conseguir buenos resultados.
Este molde tiene muchos puntos en común con el M25: “Revaloriza”, que complementa a éste aportando ejemplos de las oportunidades que existen para reciclar.
Una prioridad en la adopción de este molde es realizar un adecuado “análisis ecológico del ciclo de vida del producto”, desde el estudio de las materias primas que lo componen hasta las peculiaridades de su proceso de fabricación, desde los residuos generados durante la distribución y transporte hasta que se termina de usar y se destruye, detectando todas las oportunidades que existen a lo largo del ciclo para mejorar su comportamiento medioambiental.
Hay que informarse adecuadamente de la normativa medioambiental, y de las condiciones para optar por un etiquetado ecológico de prestigio. En este sentido conviene elegir homologaciones oficiales que sean reconocidas por los consumidores.

PREGUNTAS PARA LA REFLEXIÓN

Para trabajar este molde te invitamos a hacerte estas preguntas pensando siempre en tu organización o proyecto de empresa:

¿Crees que algunos de tus productos o servicios pueden ser percibidos negativamente por el consumidor desde el punto de vista medioambiental?
¿Existe algún segmento de mercado entre tus clientes actuales y potenciales que puede ser especialmente sensible en materia ecológica? ¿Podrías identificarlo?
¿Qué están haciendo tus competidores en el ámbito del etiquetado ecológico?
Si analizas con detenimiento todos los eslabones del ciclo de vida de tus productos más demandados, ¿en cuáles podrías introducir mejoras que los hagan “más verdes”?