El Wellness es una tendencia que entra fuerte en las empresas, dentro del mantra moderno de cultivar una vida saludable, también durante el horario de trabajo.
Muchas empresas tienen serios problemas de estrés en el personal, lo que genera problemas de baja productividad, desgano, conflictos y otros efectos nocivos. Las empresas con problemas de este tipo, que son la mayoría, pueden llegar a pagar muy bien a proveedores especializados de servicios que ayuden a solventar o mitigar el impacto de los entornos laborales exigentes en la actividad diaria de su personal. Están apareciendo así, empresas que ofrecen cursos de formación, sesiones periódicas sobre técnicas antiestrés y relajación, etc.
Una idea singular, dentro de esta categoría, es crear “espacios antiestrés” para el personal directivo que trabaja en zonas con una gran concentración de oficinas. Se habla, como se cuenta en el blog crearmiempresa.es, de los “bares antiestrés”, que pueden incluir servicios tan variados como los “bares con gatos” (una idea, cómo no, que viene de Japón), donde uno puede tomarse algo mientras acaricia uno de los animales del establecimiento; o donde además de tomarse una copa o un café, se pueda disfrutar de un masaje del cuero cabelludo para relajar tensiones.
En realidad, basta con crear un ambiente especial que invite a la tranquilidad y a olvidarse del estrés del trabajo. Es algo que consiguen muy bien algunos bares de tipo lounge, con una música relajante y mobiliario muy cómodo. Se puede pensar en instalar sillones de masaje, cuyo uso sería gratuito en caso de tomarse algo.
Por supuesto, también se puede asociar el bar a un sitio de alquiler de camas o sillones de descanso por horas, donde al mediodía los trabajadores estresados de los barrios de negocio de grandes ciudades pudiesen ir a dormir media hora de siesta en un ambiente privado, agradable y muy cómodo. ¿Te imaginas un bar donde poder hacer un descanso y echar un sueño a cualquier hora del día? Pues ya existe.
Siesta & Go, por ejemplo, es el primer bar de Madrid en el que no se consumen bebidas, sino siestas. Los clientes llegan cansados, eligen litera o habitación, reciben unas pantuflas y tapones para los oídos, y ya puedes dormir a pierna suelta todo el tiempo que quieran, a los que cobran por minuto. ¿que solo quieres descansar, pero no dormir? tienen wifi. ¿Qué tienes miedo de quedarte dormido/a? Le pides a la chica de la entrada que te despierte. Aquí tienes otra reseña sobre este establecimiento.